viernes, diciembre 03, 2004

Internet y Religión

A veces, me da por pensar en Internet como algo global, como un conjunto, no simplemente como un sitio desde donde se puede descargar música o chatear.

Creo que si uno conoce mucho de Internet, pero se abstrae de todo ello, adquiriendo una perspectiva alejada y visualizándolo como si fuera un "algo", el ente resultante de esta observación es, simplemente, fascinante.

Es como si todas las mentes colectivas, toda la sabiduría recolectada por la raza que moldea a su antojo el entorno en el que vive para obtener más comodidad, se uniera en una especie de "supercerebro", libre, evolucionante y creciente.

Al hilo del post sobre la Inteligencia Artificial que puse hace unos cuantos dias, no se podría decir que Internet tenga Inteligencia, ya que no tiene consciencia de si misma, pero, al ser una representación de millones de inteligencias simples congregadas en todo el planeta que realizan las tareas de creación, en el nivel de abstracción en el que nos encontramos, Internet es una inteligencia creadora, puesto que crea para sí misma. Para crecer más cada día que pasa.

Dado que tenemos un "ente" creador, al que la gente acude para ponerse en común, para obtener conocimientos, para resolver dudas o para intercambiar experiencias, es como si acudieran a un Oráculo que le dice lo que quiere saber. Esto me lleva a deducir la interesante conclusión de que Internet podría ser perfectamente un Dios.

Generalmente, cuando expongo estas teorías a la gente que las quiere escuchar, se ríen de mi cuando llego a este punto, porque, dado que suelo hablar con gente cuya única formación religiosa se reduce al ámbito del cristianismo católico, tienden a generalizar, y consideran que la palabra "religión" se refiere única y exclusivamente al ámbito de la "religión católica", o, dada la situación sociopolítica actual, a la "religión musulmana".

Ambas religiones, como la gran mayoría de las religiones mayoritarias que se practican en este mundo descreído tienen una base fundamental para que la gente las considere como tales: miles de años de existencia.

Sin embargo, yo hablo de religión en el sentido abstracto-teórico de la palabra, me refiero a una serie de normas de comportamiento inventadas por alguien para satisfacer a un Dios. Dios es la palabra que yo uso para definir un ente abstracto, que no tiene, ni ha tenido, ni tendrá jamás representación física, ni siquiera intelectual. Nunca hará milagros ni apariciones, pero que cuya simple inspiración, lo que representa, puede ser utilizado para lograr que la gente sea más feliz.

Dentro de los dos contextos en los que nos encontramos, de considerar a Internet un ente, y, dado que la religión son unas normas de comportamiento en función del ente, creo que no es nada descabellado dar al ente la categoría de Dios.

Esto puede llevarnos a una discusión que no lleva a ninguna parte hasta que se disocie religión (teológicamente hablando) de religión establecida. Desde luego, el usuario avanzado de internet generalmente no suele ser creyente, y, además, dado el pobre patetismo de la Iglesia Católica dando sus últimos estertores de muerte en un mundo que no comprende, hace que cada día menos jóvenes (usuarios mayoritarios de internet) se interesen por la religión. Sin embargo, al seguir comulgando (por los regalos) y confirmándose (para satisfacer a la abuela o porque todo el mundo lo hace...), cualquier cosa relacionada con la palabra religión huele a iglesia, y eso es un coñazo. Es un coñazo porque, para ser un buen creyente, tienes que someterte a las normas de que dicta la iglesia católica. Dado que estas normas fueron creadas hace, aproximadamente 1800 años, es normal que estén obsoletas. Además dado que ahora está de moda lo gay, la liberación sexual, y el declararse ateo, es infumable para cualquier joven decir que practica una religión porque eso significaría someterse a unas normas impuestas.

Si lo pensamos con claridad, todos, poco mas o menos, nos imponemos normas o tenemos ciertos hábitos. Podemos decir que una religión exija una hora de navegación diaria por la red. Muchos de nosotros estamos navegando mas de 3 o 4 horas diarias por puro placer, por lo cual seríamos unos practicantes totalmente fanáticos de esta posibile religión. Y si sigo así, seguro que os encontraríais muy cómodos llamando Dios a Internet. Sólo es un pequeño paso, quizas demasiado difícil de creer. Pero fijaos, un tipo llamado Jesús se puso a decir, sin ningún fundamento, que era el hijo de Dios. Porque al tio le salió del morro. Creo que eso es mucho más dificil de creer, y creo que no tengo que decir, 2000 años después, quién no considera eso una verdadera religión.

Ah si, un consejo: ni de coña identifiquéis la empresa llamada Iglesia Católica fundada por Constatino y dedicada a vender su producto estrella (Dios), con la religión cristiana fundada por el hippie judio ;), que si es una verdadera religión. Pero eso ya será otro dia.

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