lunes, julio 18, 2005

Escribir o no escribir

Comienzo este post dando las gracias a mi fiel lector Mikele, que me ha advertido del imperdonable error al poner el link. Ya está arreglado. Muchas gracias muchacho.

Hoy ya me siento algo mejor. Me he ido una semanita a un cliente a hacer una aplicación de control y comunicación de cajas registradoras (vamos, como diría fuckowski, forlayos). No es nada complicado y sólo es una semanita, pero es otra cosa, y me lo estoy pasando como un verdadero enano (de esos graciosos y saltarines que se lo pasan bien porque el cesped le hace cosquillas los huevecillos, no de los de Tolkien).

El fin de semana no he posteado porque me lo tomo un poco de relax-vacaciones, que tampoco merece la pena estar todo el santo dia con la antena levantada y la pluma afilada dispuesta a exfrimir las más sagaces y sarcásticas pullas contra la realidad que nos atormenta. En principio este post iba a ser una discusión metafísica conmigo mismo sobre si merece la pena seguir la promesa que hice hace una semana de escribir todos los días. Es decir, ¿hay que escribir un dia que no estés inspirando aunque sólo sea para decir: todo es un mierda y me dais asco? Tenía preparada una deducción lógica socrática por inducción y una demostración matemática, pero he cambiado de idea.

He comprendido que lo que me pasa a mi, le pasa a muuuuucha mas gente. Ya se que mal de muchos es consuelo de tontos, pero como yo no soy muy listo, pues me consuelo sabiendo que la errática marcha de mi monótono trabajo es un mal endémico del sector. Así pues, aunque debería deprimirme por la falta de salidas (¿es todo igual?), me he alegrado, por el sentimiento de solidaridad. No intentéis buscarle explicación, no la tiene.

¿Cómo me he dado cuenta de esto? se preguntará alguna de mis más avispadas y curiosas lectoras. Pues leyendo un querido blog al que últimamente me estoy aficionando mucho: Vida de un Consultor, escrito por un tal Consultor Anónimo, que también escribe para El Blog Salmón, otro de mis habituales. El Consultor Anónimo escribió varios posts que me hicieron solidarizarme con el, y el sábado, cambió y añadió enlaces en la parte izquierda de su página. Si seguís esos enlaces os encontraréis con blogs casi hermanos de este, escritos por consultores y/o informáticos que tampoco ven salida a su monótona existencia.

Ains, y el maldito Teleoperador se va de vacaciones, al igual que el maldito Fuckowski. Menos mal que de momento, no los necesito perentoriamente. Espero no necesitarlos hasta Septiembre.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Pues a veces es una lástima autoencadenarse a algo que debe ser un hobby... pero dado que parece que compartimos esa tendencia a la inconstancia, a veces "forzarse" es la mejor manera de hacer hábito, y una vez hecho el hábito ya no tenemos que pararnos a ver si "nos apetece" o no...

En cuanto al otro tema... sí, la vida laboral es monótona. Pero yo creo que es más culpa nuestra, por esperar algo de nuestros trabajos...

Saludos!